Se agotan las alternativas para comunicarse con el Spirit

El Spirit aterrizó en Marte el 04 de enero 2004

El equipo del rover ha intentado ponerse en contacto con el Spirit durante meses mediante estrategias basadas en la posibilidad de que la creciente disponibilidad de energía pueda activar la sonda robótica de la hibernación. El equipo ha probado varias estrategias de comunicación diseñadas para hacer frente a más de un problema en el vehículo.

"Los comandos que estamos enviando a partir de esta semana deberían funcionar en un escenario de múltiples fallos en el transmisor principal de Spirit y teniendo en cuenta la posibilidad de que el reloj de la misión (reloj interno del rover) haya perdido la noción del tiempo o tenga una deriva significativa", dijo John JPL Callas, director del proyecto del Spirit y Opportunity .

El Spirit aterrizó en Marte 04 de enero 2004 Tiempo Universal (03 de enero, hora del Pacífico) en una misión diseñada para una duración de tres meses. Después de lograr sus metas principales de la misión, el Spirit trabajado durante más de cinco años en misiones de larga duración bonificación de tiempo.

El Spirit no se ha comunicado desde el 22 de marzo 2010. La potencia de salida de su panel solar se había ido desvaneciendo antes de eso, y se esperaba que el vehículo entrase en un modo de hibernación de baja potencia.
Con dos de sus seis ruedas averiadas, el Spirit no había podido en meses anteriores maniobrar desde su trampa de arena. El explorador no pudo llegar a una inclinación favorable para sus paneles solares a medida que el invierno marciano se acercaba.

Durante el invierno marciano, con la mayoría de los calentadores de apagados, el Spirit experimentó la temperatura interna más fría que en cualquiera de sus tres inviernos anteriores en Marte. El frío podría haber dañado cualquiera de los varios componentes electrónicos que, si sufren daños puedan impedir el restablecimiento de la comunicación.
Sin embargo, los intentos de recuperar el contacto han seguido durante más de ocho meses en la posibilidad de que el aumento estacional de la energía solar disponible en la localización del Spirit podría revivir el rover.